Maquiladoras de la Industria Eléctrica
Las Recientes Tendencias Internacionales (1980-1989)
El rasgo sobresaliente del periodo considerado (1980-1989) es el agudizamiento de la crisis mundial más severa de este siglo, después de la de 1929. En él se sintetizan los graves problemas financieros y comerciales, suscitados a lo largo de 18 años entre Estados Unidos, Japón y los países de laComunidad Económica Europea (CEE), los cuales han determinado el reciente despliegue productivo de algunas industrias de alta tecnología (electrónica y automotriz, básicamente).
Como está documentado ampliamente en la bibliografía al respecto, esas industrias iniciaron un importante proceso de restructuración productiva a raíz de las estrepitosas caídas registradas en el precio del semiconductor(1974-1975 y 1980-1982) y en las ventas de autos medianos y grandes (1980-1982), lo cual les llevó a modificar sus anteriores prácticas competitivas.1
Es debido a ello por lo que algunos autores sostienen que para estudiar los cambios actuales de estas dos industrias es necesario resaltar la estrecha relación existente entre crisis, reconversión industrial, internacionalización productiva ycompetencia.2 Lo cual implica abandonar, o cuando menos adecuar, aquellos esquemas de interpretación que privilegian únicamente unos cuantos factores invariables como las causas explicatorias de la nueva división internacional del trabajo.
Esto último conviene subrayarlo porque es claro que cada vez es mayor el número de casos que, a manera de contraejemplo, se opone a la tendencia inicialmentedescrita por Froebel y otros autores,3 quienes reconocen en el salario bajo, por ejemplo, a una de las condiciones sine qua non del desplazamiento de segmentos productivos a la periferia.
Actualmente existen otros aspectos, contenidos en la experiencia de las industrias de alta tecnología que explican las nuevas posibilidades de relocalización de las plantas (e incluso de retomo a sus lugares deorigen) y que no necesariamente están vinculados con el criterio de los bajos salarios. Estos tienen que ver con los que Joan Robinson llamó alguna vez elementos de la “competencia no basada en los precios”4 y que pueden resumirse en: el control y aplicación crecientes de la automatización flexible por parte de las grandes empresas japonesas, norteamericanas, europeas y coreanas; lacorporativización de las prácticas comerciales como recurso para levantar barreras a los nuevos competidores; la utilización de estrategias alternativas por parte de los gobiernos para fortalecer a sus empresas (proyectos militares, políticas proteccionistas, etcétera) y lograr que las economías a escala sean óptimas por medio de la centralización de proveedores y el uso de tecnologías blandas.5
Es convenienteadvenir, sin embargo, que las diferencias introducidas por estos elementos aún no son muy claras y, en todo caso, reflejan nada más una tendencia importante.6
La lógica dominante de la exportación de segmentos productivos a las zonas no desarrolladas continúa siendo la misma seguida en años anteriores, tal como se desprende de los más recientes emplazamientos observados en dichos sitios.7 Lorealmente novedoso de esas cuatro prácticas monopólicas radica más bien en la forma de abatir los costos y de enfrentar la competencia por parte de las corporaciones: ya no es la misma que en la década pasada y hacia ese punto será concentrada la atención.
Control y aplicación crecientes de la tecnología flexible
La incorporación de los avances de la microelectrónica al proceso productivo, esla base de la nueva estrategia asumida por las industrias electrónica y automotriz para disminuir la participación del salario dentro de sus costos totales y así poder sortear mejor la crisis. Dicha estrategia se basa en la aplicación extrema de maquinaria reprogramable en aquellas áreas donde antes resultaba incosteable adaptar tecnología rígida (o sea, las fases intensivas de fuerza de…