CAPITULO PRIMERO
“HENOS AQUÍ REUNIDOS”
El primer paisaje que vemos los hombres es el rostro y el rastro de otros seres como nosotros, las paredes de la habitación, el fuego encendido para calentarnos y protegernos, llegar al mundo es llegar a nuestro mundo, al mundo de los humanos. Pero esa sociedad que nos rodea y nos empapa, que nos irá también dando forma no solo se compone de personas,objetos y edificios. Es una red de lazos más sutiles o más espirituales, esta compuesta de lenguaje, de memoria compartida, de costumbres, leyes…hay obligaciones y fiestas, prohibiciones, premios y castigos. Algunos comportamientos son tabú y otros merecen general aplauso. La sociedad guarda por tanto información.
Primer problema a resolver. La sociedad nos sirve, pero también hay que servirla:esta a mi servicio, pero solo en la medida en que yo me resigne al ponerme al suyo. Cada una de las ventajas que ofrece viene acompañada de limitaciones, de instrucciones y exigencias, de reglas de uso: de imposiciones. Si pongo pegas a sus imposiciones o rechazo su ayuda, me castiga de un modo u otro.
Las leyes e imposiciones de la sociedad son siempre nada mas que convenciones. Por antiguasrespetables o temibles que parezcan, no forman parte inmovible de la realidad ni brotan de la voluntad de algún Dios misterioso: han sido inventadas por los hombres, responden a designios humanos comprensibles y pueden ser modificadas por un nuevo acuerdo entre los humanos. Y ¿Qué es la razón? La capacidad de establecer convenciones, o sea, leyes que no nos vengan impuestas por la biología sino queaceptemos voluntariamente. Por medio de la razón patentamos suplementos y complementos a nuestros instintos. Los animales no tienen más código que el código genético; nosotros también tenemos el genético, desde luego, pero además el código penal, el código civil y el código de la circulación. Esas leyes que practicamos entre nosotros y que obedecemos con la cabeza no son ni puramente instintivas nipuramente racionales, sino que mezclan estímulos distintos y a veces paradójicos. Pero como son también instintivamente racionales, además de sobrevivir responden al deseo de vivir mas y mejor.
Los animales viven esforzándose por no morir, los hombres vivimos luchando por no morir y a la vez pendientes que en cualquier momento tendremos que morir, morir es una costumbre que suele tener la gente. Sila muerte es soledad definitiva, la sociedad nos brinda compañía permanente, si la muerte es debilidad e inacción, la soledad se ofrece como la sede de la fuerza colectiva y origen de mil tareas, hazañas y logros
La muerte es natural, por eso la sociedad humana es en cierto modo sobrenatural.
La razón de que el hombre sea un ser social, mas que cualquier abeja y que cualquier animal gregarioes clara. Solo el hombre entre los animales posee la palabra. La voz es una indicación del dolor y del placer. En cambio la palabra existe para manifestar lo conveniente y lo dañino, así como lo justo y lo injusto.
CAPITULO SEGUNDO
“OBEDIENTES Y REBELDES”
El hombre es un animal cívico, un animal político (lo cual no debe confundirse con que los políticos sean unos animales), es decir quesomos unos bichos sociables, pero no instintiva y automáticamente sociales, los humanos inventamos formas de sociedad diversas, transformamos la sociedad en que hemos nacido, en una palabra: no solo repetimos los gestos de los demás y obedecemos las normas de nuestro grupo sino que llegado el caso desobedecemos, nos revelamos, violamos las rutinas y las normas establecidas.
El hombre es el únicoanimal capaz de sublevarse, los hombres nos estamos sublevando a cada paso.
La política no es más que el conjunto de las razones para obedecer y de razones para sublevarse.
La anarquía postula una sociedad sin razones para obedecer ni rebelarse, plantea: el final de la política. Ellos suponen que tenemos tendencia espontánea y natural a la cooperación, a la solidaridad y al apoyo mutuo que a…