“Nuevo México Profundo”Trata de la violación el estado de silenciamiento de un conglomerado cultural donde cualquier noción de origen y la identidad está íntimamente envuelto en siglos de dominación y represión.
En este contexto amplio, quizá no sea sorprendente que el Opus combinado Gandert de eventos culturales abarca todo caballo de batallas entre moros y cristianos a los ataques Commanchepromulgada en las aldeas del norte alrededor de Taos. La mayoría de los aspectos de las creencias y costumbres que posiblemente podría constituir una cultura indo-Hispano Ha sido puesta en juego. En la imagen después de la imagen capturada a lo largo del Valle del Río Grande, desde el campanario en el horizonte al Alcalde a las procesiones largo de la presentación de bailarines de Apache a travésde Juárez, las variaciones previstas de traje nativo y las costumbres cristianas se repiten una y otra vez para reafirmar el espíritu colectivo de una identidad indo-hispano. Recogidas en dicha declaración de manera uniforme, sin embargo, esta mezcla casi perfecta de la nomenclatura binaria parece reiterar el principio de funcionamiento que inicialmente reprimida (como sigue deliberadamenteignorar) la existencia abrumadora de los cruces culturales y genéticos. Visto como un todo editado, la exposición de manera explícita tanto presume, y sugiere que la raza y carácter, o la fusión científicamente evolucionado de los genes y el comportamiento, se entrelazan con la determinación biológica de que las fuerzas de los organismos a actuar en formas genéticamente establecido. A través dedeterminados actos simbólicos, blandiendo la pluma y la cruz en ocho secciones distintas exposiciones, Gandert ha tratado de dar la Cultura Indo-Hispano un rostro reconocible con las mismas características que Edward Curtis fue buscando en sus propios retratos. Curtis siguieron el rastro eugenésicas en sus misiones de rescate de una raza de fuga por la documentación de lo que él creía que los genes queagotan rápidamente. Cuidadosamente orquestado una superficie expresiva, que con perspicacia salvar las características interiorizado y garantizado para la posteridad a través del acto de la fotografía.
Ante la decisión de su predecesor designado para desarrollar un proyecto de genoma nativo a través de código de vestimenta inventiva, Gandert se niega a abordar la enorme importancia de estasdecisiones y de las copias con la misma discreción paterna en nombre de un estancamiento de la reproducción. De acuerdo a las etiquetas de exposición, cuatro grandes retratos hechos con una cámara de gran formato (como Linda Elena, Talpa, 1995) son a propósito imitando el estilo de Curtis “, el documento se pasa por alto lo que Curtis.” Cuando esta volviendo la mirada se reúne para abordar un punto ciegocon la visión cuestionable mismo, los sujetos conservan generaciones además entrar en la misma genealogía, sino que dejar de realizar el pasado de periodicidad anual y se convierten en maniquíes para un destino eterno otorgado a ellos a través de una inversión en depósitos de plata . Una vez fuera de una realización en evolución, el diálogo gira de una narración histórica entre un presenteampliado menos propenso a la mutación y la más favorable a las definiciones enmarcadas. Gandert parece haber olvidado que la fotografía documental siempre tiene por objeto reprimir una presencia complicada y mezclada en favor de una unidad compuesta de persuasión de sujeto y objeto, carne y papel cuché, o un sentido aparente y de sus recursos formales.
Los diálogos se entrelazan aquí son varias vecescruzar el territorio controlado por la historia y su representación, y presumiblemente Gandert ve sus fotografías como la confluencia de un continuo, donde estas entidades se encuentran. Es tal vez inevitable, entonces, que todas las fotografías en esta exposición es un vehículo de expresión partiendo de ciertas ecuaciones de la diferencia. En Indo-Hispano procesiones en las fotografías de…