Literatura

Y a continuación -seguí- compara con la siguiente escena el estado en que, con respecto a la educación o a la falta de ella, se halla nuestra naturaleza. Imagina una especie de cavernosa vivienda subterránea provista de una larga entrada, abierta a la luz, que se extiende a lo ancho de toda la caverna y unos hombres que están en ella desde niños, atados por las piernas y el cuello de modo quetengan que estarse quietos y mirar únicamente hacia adelante, pues las ligaduras les impiden volver la cabeza; detrás de ellos, la luz de un fuego que arde algo lejos y en plano superior, y entre el fuego y los encadenados, un camino situado en alto; y a lo largo del camino suponte que ha sido construido un tabiquillo parecido a las mamparas que se alzan entre los titiriteros y el público, por encimade las cuales exhiben aquéllos sus maravillas. (514a-b)
Por tanto, aquello que debemos desarrollar no es otra cosa que el resultado de la educación o su ausencia produce en nuestra naturaleza, si se desea otra palabra menos fuerte o filosófica se puede usar carácter, o capacidad y posibilidad de desarrollo:
-Entonces no hay duda -dije yo- de que los tales no tendrán por real ninguna otra cosamás que las sombras de los objetos fabricados. (515b)
Ya desde el primer momento se nos plantea el problema, ¿es real lo que creemos real? pero ¿y que tiene esto que ver con la instrucción y la educación? Estamos ya situados ante el problema. La cuestión sobre el presentimiento de que lo se muestra no es todo lo que existe. Definido adecuadamente estamos ante un problema ontológico, epistemológico,metafísico, y si me apuran existencial. En primer lugar debemos preguntarnos, ¿quiénes somos? ¿porqué existimos? ¿hay alguna razón para ello? Desde el punto de vista del conocimiento cabrían mayores preguntas aún: ¿lo que conocemos es lo que existe? cuando conocemos ¿conocemos de forma real, esto es, desde la más radical identidad de lo conocido?, y si no es así ¿tiene algún sentido otrapregunta? Sólo cabría una más ¿Por qué existe lo que existe? o mejor dicho ¿Por qué el ser y no la nada? Según se responda a estas preguntas, cada cual se situará de una manera ante la vida y la existencia.
-Examina, pues -dije-, qué pasaría si fueran liberados de sus cadenas y curados de su ignorancia y si, conforme a naturaleza, les ocurriera lo siguiente. Cuando uno de ellos fuera desatado y obligadoa levantarse súbitamente y a volver el cuello y a andar y a mirar a la luz y cuando, al hacer todo esto, sintiera dolor y, por causa de las chiribitas, no fuera capaz de ver aquellos objetos cuyas sombras veía antes, ¿qué crees que contestaría si le dijera alguien que antes no veía más que sombras inanes y que es ahora cuando, hallándose más cerca de la realidad y vuelto de cara a objetos másreales, goza de una visión más verdadera, y si fueramos mostrándole los objetos que pasan y obligándole a contestar a sus preguntas acerca de qué es cada uno de ellos? ¿No crees que estaría perplejo y que lo que antes había contemplado le parecería más verdadero que lo que entonces se le mostraba? (515c-d)
Si seguimos las palabras del divino Platón entenderemos dos matices del conocimiento, uno elacento liberador, otro la agonía del que aprende, pues conocer, ser iluminado, es doloroso. Por otro lado llama la atención el adverbio delante del adjetivo. ¿Puede ser la verdad más verdadera? De siempre se nos ha dicho que una cosa o es verdadera o falsa. Así ha sido desde los umbrosos orígenes del pensamiento, pero ¿y si la verdad pudiera mentirnos?, ¿y si la mentira guardara dentro de sí muchamás verdad?
-Y, si se lo llevaran de allí a la fuerza -dije-, obligándole a recorrer la áspera y escarpada subida, y no le dejaran antes de haberle arrastrado hasta la luz del sol, ¿no crees que sufriría y llevaría a mal el ser arrastrado y, una vez llegado a la luz, tendría los ojos tan llenos de ella que no sería capaz de ver ni una sola de las cosas a las que ahora llamamos verdaderas?
-Y…