sábado 27 de febrero de 2010
¿ FIN DE LA HISTORIA O FIN DEL SISTEMA ?
Carlos EsparzaCARLOS ESPARZA El concepto “fin de la historia”, término acuñado por Francis Fukuyama, es una quimera inventadapor el actual mundo occidental y no una metáfora surgida de su evidente falta de imaginación, tampoco el anuncio de un terrible Apocalipsis. Ese fin de la historia es un escenario creado por el sistema,un estado universal y homogéneo que aparecería, cuando y porque, el mundo moderno habría llegado al final de su camino y no habría ya revolución posible. Se consideraría a sí mismo un mundo perfecto,un sistema indestructible.De ese concepto nace otro, más terrible si cabe “el último hombre”. Ese último hombre es lado más lóbrego del sistema occidental. Un ser egoísta hasta la barbarie, débil deespíritu, temeroso, incapaz de valerse por si mismo fuera del sistema establecido, un esclavo que carece de interés por preguntarse que es la libertad, un ser sin alma. Ese hombre ha dejado depreguntarse acerca de sí mismo, y en consecuencia acerca de su función en el universo, un hombre inhabilitado para defender hasta su propia identidad.Lejos quedaría ya el “Thymos” de Sócrates, es decir, lafuerza vital, el valor espiritual que uno se otorga así mismo y que se pone a prueba en la relación con el mundo, con los otros hombres y con uno mismo. De lo que Sócrates denomina “thymos” nace elcoraje, la vergüenza, la capacidad de arriesgar la propia vida, la ira, el orgullo, la capacidad de superación permanente de uno mismo. Por esa razón dice Sócrates que el “thymos” debe ser la cualidadpredominante en los guerreros a cuyo cargo quede la custodia de la “ciudad justa”.Toda ética del honor nace de ahí: cuando uno siente vergüenza de su propia conducta, cuando se subleva contra lasinjusticias o cuando se entrega a una causa individual o colectiva arriesgando, si es preciso, su propia existencia. Pero también nace del “thymos” la base de acción de cualquier política: la designación…