crisis del sistema financiero internacional que tiene sus manifestaciones más dramáticas en el sistema bancario de los Estados Unidos y se ha extendido como efecto dominó a prácticamente todas las economías que interactúan con la estadounidense tiene ya, y seguirá teniendo, efectos altamente negativos en la economía mexicana.
En este sentido, no deja de sorprender la minimización que de lamisma hicieran al momento de su estallido los más altos funcionarios mexicanos encargados de las políticas financiera y monetaria del país: don Agustín Carstens y don Guillermo Ortiz. Me parece que la explicación de su miopía radica en la fe ciega que los funcionarios citados tienen en los manuales elaborados por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, que en esta ocasión de plano lesfallaron.
¿Como concebir -debieron haber pensado-, que si el gobierno de México ha cumplido a pie puntillas los dictados del neoliberalismo: control a toda costa de la inflación, crecimiento salarial por debajo de la misma, un peso sobrevaluado respecto al dólar para atraer inversión, un sistema fiscal generoso con las ganancias del capital para propiciar inversión productiva, superávit en lasfinanzas públicas, toda clase de garantías a la inversión extranjera, entre otras medidas, un tropiezo del sistema financiero estadounidense generado por el exceso de crédito y de confianza de los banqueros de ese país podría afectar a la economía mexicana?
La respuesta ellos mismos la han empezado a dar tras aceptar que finanzas públicas bajo control no es equivalente a fortaleza económica.
Parael Gobernador del Banco de México la función fundamental de la institución que encabeza debe ser el control de la inflación (así lo ha declarado) y se ufana de haber cumplido con la misma. Para lograr ese objetivo las autoridades del banco central han hecho hasta lo imposible: de manera permanente han mantenido el circulante bajo a través de los llamados cortos; han contenido el crecimiento de lossalarios por abajo de la inflación y establecido las tasas bancarias muy por encima de la misma, estimulando el ahorro y la inversión especulativa; mantenido el peso sobrevaluado en un promedio de 10 a 15% con respecto al dólar durante los últimos 25 años.
A cambio de lo anterior han rezagado los salarios, generando una elevada pérdida en su capacidad de compra, la distribución de la riqueza se hapolarizado en el país, el crédito se ha encarecido en términos reales, le han restado competitividad a las empresas nacionales con relación a las extranjeras que inundan con sus productos nuestros mercados debido a la sobrevaluación del peso con respecto al dólar.
Al día de hoy miles y miles de empresas que se dedicaban a la producción de bienes de consumo para el mercado local han cerrado porhaber dejado de ser competitivas frente a una competencia extranjera desleal, pero protegida por el Banco de México, con la consecuente pérdida de empleo e incremento en la pobreza.
La crisis del sistema financiero estadounidense está causando que los consumidores de ese país se amarren el cinturón y consuman menos. Este hecho se está traduciendo ya en pérdidas de empleo en la construcción, losservicios y una multitud de actividades económicas.
Los primeros afectados están siendo los trabajadores indocumentados, que carecen de autorización para trabajar en ese país. En segundo lugar, están siendo afectados quienes desempeñan trabajos en actividades como la construcción, mantenimiento, el turismo, la industria restaurantera, y otro tipo servicios, ya sea por la pérdida de sus empleos o porla reducción de sus salarios.
Las remesas que envían al país quienes emigraron por necesidad se están viendo severamente reducidas. Muchos de quienes salieron en años recientes están regresando y obviamente quienes tenían la intención de emigrar desistirán dada la contracción en el mercado laboral estadounidense.
Debido a que el consumo continuará reduciéndose mientras persista la crisis, las…