Chamanismo y neochamanismo mapuche urbano
Eduardo Medina Cárdenas
Introducción
Cuando los conquistadores españoles llegaron al territorio correspondiente a Chile, denominaron ‘araucanos’ a todos los aborígenes existentes entre el río Aconcagua y la Isla Grande de Chiloé, porque estaban organizados ancestralmente en numerosas tribus o jefaturas según una misma estructura patrilineal,con similares lengua y costumbres, aunque entre ellos mismos ya se diferenciaban como picunches (gente del norte), mapuches (gente de la tierra, en los valles centrales, los más numerosos) y huilliches (gente del sur), además de otros grupos menores, totalizando entonces unas 700.000 personas. Los primeros fueron integrados por completo durante la Colonia, perdiendo su identidad cultural, en tantoque los mapuches resistieron más encarnizadamente al conquistador español y luego a la república independiente, desde el primer contacto en 1536 hasta su sometimiento definitivo en 1883 (pacificación, en la terminología oficial); por esta misma época entraron en escena los pehuenches (gente de donde crece el pehuen, conífera típica de la cordillera de esta zona), grupo migrado desde allende losAndes arrancando de análogo proceso de dominio por parte de la República Argentina. A continuación de la derrota todos los grupos remanentes fueron sometidos a vivir en ‘reducciones’ (mercedes de tierras otorgadas a los lonkos, los jefes de familias o de linajes), con el consiguiente progresivo agotamiento de las mismas, derivado de explotación rústica de sus terrenos, sobrepoblación, depredaciónanimal y vegetal, etc.
Durante todo el siglo XX los araucanos estuvieron sujetos a diferentes estrategias educacionales y sanitarias, así como de conducción ideológica de variados grupos políticos y religiosos, con el objetivo final de su incorporación funcional a la sociedad dominante; asociado con todo ello, en particular en su segunda mitad, lo más característico ha sido una sostenidamigración urbana y diferentes altibajos en cuanto a estrategias de conservación de identidad étnica, mostrando dinámicas aculturativas y hasta contraculturativas que, si bien a su mayoría los ha ubicado en condiciones subalternas respecto a los estratos dominantes urbanos, a unos pocos sujetos incorporados a diferentes grupos de poder les ha permitido articularse más favorablemente en roles laborales,profesionales, políticos e incluso en la administración del Estado. Éste, por su parte, de una actitud indiscriminadamente integradora a la sociedad nacional mantenida durante la mayor parte del período, desde los años 90 en adelante muestra creciente comprensión hacia la conservación de la identidad cultural de las diferentes etnias del país; dentro de este nuevo trato resulta entendible eldesarrollo de actividades educacionales y sanitarias biculturales o interculturales. La última Ley Indigenista (Nº 19.253, de 1993) creó la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (CONADI), entidad estatal preocupada del desarrollo e identidad cultural de las diferentes etnias del territorio nacional .
En la actualidad todavía conservan su identidad cultural original unas 730.000 personas desimilar cultura , ubicadas en unas 3.500 reducciones entre el río Bío-Bío (Región del Bío-Bío) y Chiloé (Región de Los Lagos), aunque éstas en su mayoría se ubican en la Región de La Araucanía (allí constituyen un 60% de su población rural); de todos ellos, una mitad todavía vive asociada al trabajo de la tierra, en tanto que la otra mitad ha migrado más o menos establemente a diferentes ciudades dela zona central y sur del país, particularmente a la Región Metropolitana . Parte de los mapuches actuales todavía conservan numerosas características culturales ancestrales, tales como su lengua y su medicina tradicional centrada en torno a la figura de su chamán, en este caso, el (la) machi, así como la celebración de ciertas festividades asociadas con el ciclo agrícola ; por otra parte,…